Aprende todo lo que no dicen de la faringitis, qué es, causas, síntomas y tratamientos más eficaces! Además, descubre más sobre la amigdalitis.
¿Qué es la faringitis?
La faringitis es una infección que muchas personas sufren con cierta frecuencia.
La faringitis es un malestar que, como su nombre indica, se caracteriza por la inflamación de la garganta.
Específicamente la zona afectada es la faringe, aunque puede confundirse con otros padecimientos con las anginas.
La mayoría de nosotros solemos confundir la faringe y la garganta como la misma cosa. En teoría lo son, solo que la garganta incluiría otras partes que están posteriores a la faringe.
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Su extensión es bastante amplia ya que va desde la nariz o la boca y limita finalmente con la laringe.
Esta parte del cuerpo cumple dos funciones fundamentales, es por ello que es tan importante su cuidado.
En primer lugar, la faringe se encargada de ser uno de los primeros canales conductores del aire que se respira hacia los lugares que le corresponde llegar, incluido los pulmones.
Igualmente dará paso a los diferentes alimentos, después de ser previamente masticados, hacia el esófago para continuar con el proceso digestivo natural del organismo.
Debido a que por esta vía pasan constantemente diferentes microorganismos, tanto buenos como malos, es muy probable que se vea afectada por los mismos de tipo negativo.
Es allí donde aparecen los casos de faringitis, ya que algunos de ellos se alojan en esta área, ocasionando daños en el sistema inmunológico.
La faringitis en principio no es grave, solamente si no es tratada a tiempo puede provocar daños mayores.
Es por ello que hay que aprender a distinguirla según su gravedad, normal aguda o crónica; de esta forma se tomarán las precauciones necesarias para solucionar el problema como corresponde.
Causas de la faringitis
La faringitis puede ser causada por dos tipos de agentes nocivos que buscarán alojarse en la faringe. El organismo al detectarlos intentará defenderse, en la mayoría de los casos.
La enfermedad aparece concretamente cuando la cantidad de microorganismos supera en gran medida al número de defensas del cuerpo, por lo que este no tiene cómo protegerse.
Ese preciso instante de debilidad es el que aprovechan las defensas para que aparezcan los distintos síntomas del padecimiento, de esta forma se enviará una señal al resto del organismo de que existe un problema en esa zona.
Pero antes de poder establecer cualquier tipo de diagnóstico hay que conocer cuáles son los agentes nocivos causantes de la enfermedad.
De esta forma se podrá establecer su posterior tratamiento, ya que varían según el caso que se presente.
- Viral: La faringitis de tipo viral es aquella que, como su nombre lo indica, su causante principal son los virus. Algunos de los más comunes son los adenovirus, Epstein-Barr, los virus de la gripe o influenza, los de tipo respiratorio o el rinovirus. Cada uno de ellos deja consecuencias y síntomas distintos en el organismo que pueden resultar en gripes comunes o en padecimientos más graves.
- Bacteriana: En el caso de las bacterias se tiene que la más común, sobre todo en niños y adolescentes, es el estreptococo en varias de sus formas. Estos agentes son los principales causantes de la infección en general y deben de ser combatidos lo más pronto posible. De no ser tratados a tiempo pueden generar enfermedades como la difteria o el síndrome de Lemierre, por mencionar algunas consecuencias.
Tratamientos Antibióticos para curar la faringitis
Los tratamientos antibióticos son especialmente recetados para la cura de la faringitis que es causada por bacterias.
Es la forma que tendrá el organismo para mejorarse más rápidamente ya que sirven de apoyo en la lucha contra la enfermedad.
Son de bastante ayuda ya que reducen la infección y a la vez disminuyen en gran medida los síntomas.
En los casos más graves de faringitis viral también se recetarán los antibióticos ya que comúnmente existirá un cuadro infeccioso que debe ser eliminado lo más pronto posible.
La idea es que en ninguno de los casos, ni por bacteria ni por virus, se extienda el contagio hacia otras zonas del cuerpo, de esta forma se evitará el daño en órganos internos más profundos.
Igualmente hay que recordar que existen casos particulares de faringitis donde los tratamientos antibióticos son prohibidos debido a que pueden empeorar el estado del paciente.
Es por ello que se debe evitar la automedicación y consultar al médico cuando se tienen cualquier indicio de este malestar.
Hay algunos fármacos específicos que deben ser conocidos, sobre todo en el caso de los niños. La idea es saber el efecto que generan en el organismo.
- Penicilina: Es el primer fármaco y el mas comúnmente recetado para el tratamiento de las infecciones como la faringitis. El tratamiento durará aproximadamente diez días, luego de pasado ese tiempo el organismo debería estar a salvo de las bacterias. Las presentaciones que más se utilizan del fármaco son las Benzatina o la Amoxicilina y pueden ser ingeridas en forma de pastillas o también por inyecciones.
- Macrólido: Estos fármacos son un tipo específicamente utilizados por las personas alérgicas a la penicilina. La presentación más común es la Azitromicina y su uso puede variar igualmente entre 10 o 12 días, dependiendo de lo que disponga el médico tratante.
Remedios Caseros y tratamientos naturales para la faringitis
Existen varios remedios naturales o remedios caseros para curar la faringitis.
En el caso de que el paciente quiera obtener efectos más continuos para la curación de la faringitis, puede probar con diversos remedios caseros que servirán para librarse de la enfermedad.
Los mismos deben ser previamente consultados con el médico tratante ya que no se quiere que haya un aumento en la gravedad de los síntomas.
- Limón con un poco de miel: Este es todo un clásico dentro de los remedios caseros más relevantes para el tratamiento de cualquier infección de las vías respiratorias, por ello siempre se recomienda su uso. Solo hay que exprimir el zumo de la fruta y añadir el dulzor de la miel para ingerirlo una vez al día, si es en ayunas mucho mejor.
- El llantén: Las infusiones o jarabes hechos con esta planta tienen propiedades reparadoras y antiinflamatorias en las vías respiratorias. Igualmente ayudara en la lucha contra las bacterias causantes de la infección.
- Sopa o caldo caliente: Puede sonar algo descabellado pero realmente funciona y está probado desde hace mucho tiempo. La idea es usar diversos ingredientes como el pollo y también verduras como la papa, ajo o vegetales verdes. Al combinarlo se creara una sustancia con propiedades sanadoras indiscutibles.
- Orégano: Esta planta puede ser utilizada en forma de té o infusión para aprovechar sus beneficios antisépticos y expectorantes. Lo mejor es poder ingerir dos tazas de cualquiera de las dos bebidas, una dosis en la mañana y otra en horas nocturnas.
- Las flores de sauco: Una idea muy buena para afrontar la faringitis es la de colocar una buena cantidad de agua en punto de ebullición con algunas flores de esta planta. Luego de dejarlo reposar por 20 minutos y colarlo posteriormente se pueden hacer gárgaras dos o tres veces al día con la mezcla, para eliminar la inflamación en la faringe.
Síntomas
Hay ciertos síntomas que serán señal característica de que se está pasando por un proceso infeccioso a causa de una faringitis. De hecho hay algunos que son sumamente comunes y otros que pueden ser indicativo clave de que está empeorando la enfermedad.
- Dolor de garganta: Es el síntoma más básico de todos. Es la clara muestra de que hay un problema en esta parte del cuerpo y que lo más probable es que resulte de una faringitis. También puede verse reflejado en forma de ardor, molestias al tragar o inflamación pronunciada en la zona.
- Dolor de cabeza: Otra señal de que puede existir un caso de faringitis es cuando se presenta constantes dolores de cabeza. Esto se debe a que el organismo está luchando contra la enfermedad y el agotamiento se ve reflejado en esta zona del cuerpo.
- Problemas en la voz: La garganta es el conducto principal por el cual viaja los sonidos producidos por la voz. Al verse afectada la faringe tendrá como consecuencia problemas de la voz como la ronquera o la pérdida total en los casos más graves.
- Fiebre: Es la muestra principal de que existe un proceso infeccioso, en el cual hay que ejercer un tratamiento.
- Problemas en las amígdalas: Cuando las infecciones de la faringe se agravan, por no ser tratadas a tiempo, pueden llegar a afectar otras partes del organismo. Al estar las amígdalas tan cerca de esta zona se pueden generar cuadros de amigdalitis o ganglios inflamados.
- Erupciones: La aparición de pus o pequeñas erupciones en la faringe también suele ser bastante común en este tipo de casos. Las mismas pueden generar problemas al momento de deglutir la comida o incluso molestias al momento de tragar saliva. De hecho si las llagas se revientan pueden causar un dolor en la zona bastante difícil de sobrellevar.
¿Cuánto dura la faringitis?
Cada uno de los casos de faringitis tendrá una duración diferente ya que el desarrollo de la enfermedad y su posterior tratamiento dependerán de ciertas características específicas. Te contamos cuanto dura la faringitis.
De hecho el tiempo de duración es uno de los factores que determina el tipo de enfermedad con la que se está luchando.
- Faringitis aguda: Es la más común de todas y su duración no debe extenderse por más de 5 días bajo tratamiento, de ser así se estaría transformando en otro tipo de enfermedad. Puede ser de tipo vírico o bacteriano. En ambos casos su tratamiento se prolongará por algunos días para asegurarse de que se ha erradicado la enfermedad por completo.
- Faringitis subaguda: Dura un poco más que la anterior, de siete a diez días. En este tiempo el paciente debe ser muy consecuente son la medicación que el especialista haya recomendado.
- Faringitis crónica: Es cuando la faringitis se repite constantemente, pudiendo generar otro tipo de síntomas más graves. En este caso puede variar entre quince días o un mes ya que no depende de la cantidad de tiempo que dure sino más bien de su prolongada repetición.
- Faringitis alérgica: sucede un caso similar que con la crónica, pero con la diferencia de que los periodos de tiempo variaran entre los 2 y 3 días pero con comprobada repetición.
- Complicaciones: En el caso de que la faringitis se complique puede durar hasta un mes bajo tratamiento y su control será mucho más específico que en los casos anteriores. Aunque este tipo de procesos son raramente vistos ya que es una enfermedad muy sencilla de eliminar.
Es Contagiosa la faringitis?
Cuando se habla de contagio de la faringitis se debe tomar en cuenta el agente causante de la misma, debido a que este variará las posibilidades de transmisión de la enfermedad.
Efectivamente la faringitis puede propagarse de persona a persona, de eso no hay duda, pero en algunos casos podrá darse de manera más fácil que en otros.
En cualquier caso la enfermedad suele contagiarse en los primeros días de su aparición, donde incluso no hay síntomas detectables a simple vista.
Aunque hay tres situaciones particulares que facilitan su propagación.
La primera es a través de las pequeñas cantidades de saliva que el ser humano expulsa al hablar, estornudar o al toser.
De esta forma los microorganismos logran salir del cuerpo y viajan a través del aire en búsqueda de otra entidad en la cual alojarse.
Si esa figura que los recibe tiene una buena cantidad de defensas no habrá ningún inconveniente, de no ser así puede comenzar a desarrollarse la enfermedad.
Existe un segundo caso que se presenta sobre todo en la faringitis de tipo viral.
Este se debe a los cambios de temperatura, sobre todo por la aparición de climas fríos o muy húmedos en el que a los agentes infecciosos se les hace mucho más fácil invadir al organismo.
Además de que su desarrollo será mucho más rápido.
Un tercer factor es que está determinado por los ambientes contaminados, incluso en el caso de las personas que fuman.
En estos casos particulares las bacterias y virus estarán estos ambientes y podrán entrar en mayor medida causando fácilmente un agrupamiento en la zona de la faringe.
Faringitis En niños
Cuando existe un caso de faringitis en niños puede estar determinado por su síntoma principal que el dolor en la garganta.
Aunque puede ser fácilmente confundida con la amigdalitis.
Por este motivo ante la aparición de cualquier síntoma el médico recetará un examen llamado cultivo faríngeo, el cual determinará el tipo de virus o bacteria a la cual se está enfrentando el cuerpo del pequeño.
En los menores es común que la faringitis se presente de tipo viral, de hecho hay un 90% de probabilidades de que sea de esta clase en particular.
Para el resto de los casos podrá existir la aparición de una bacteria llamada estreptococo del Grupo A, ya que es la más recurrente en los pequeños.
Hay que tener muy presente que los dolores que ocasiona esta enfermedad pueden generar que haya una disminución del apetito e incluso quejas y llanto por parte del infante, dependiendo de su edad.
En los casos más graves puede que se observe algún problema para respirar y fiebres pronunciadas que pueden afectar al resto del organismo.
Para solucionar el padecimiento se debe llevar primero al pequeño al médico.
Los padres o representante no pueden pretender curarlo por su cuenta ya que podrían hacer que los síntomas, y la enfermedad en general, empeoren.
El especialista indicará los fármacos adecuados según la tipología, los cuales pueden variar entre paracetamol o ibuprofeno, hasta antibióticos como la penicilina.
Es importante en gran medida que los niños que estén pasando por faringitis tomen grandes cantidades de agua, se alimenten adecuadamente y tengan un periodo de descanso apropiado.
La idea es que, por la cantidad de días que dure el reposo, el menor no asista a sus actividades cotidianas, como por ejemplo la escuela, para evitar contagiar al resto de sus compañeros.
De esta forma el cuerpo podrá recuperarse adecuadamente, además de que no será por periodo demasiado extenso, con dos o tres días será suficiente si la enfermedad no ha avanzado demasiado.